Selena Gomez fue una de las musas que agitó a las masas presentes por su belleza y forma de vestir. La menuda actriz secundó en llegar a Lady Gaga, quien se llevó los aplausos y premios en la gala.
A la luz de los flashes, que no cesaban por robarle una sonrisa, la joven estrella lució adorable saludando a sus fanaticos y pasando por la alfombra blanca.
Nuestra lindisima Selena se robo todos los flashes.